La alfabetización audiovisual constituye una de las urgencias del momento en las sociedades iberoamericanas, en ese sentido publico las conclusiones del “Estudio sobre la alfabetización audiovisual de los adolescentes vascos: Recopilatorio de actitudes críticas y acríticas” de Txema Ramírez de la Piscina, Esther Zarandona, Jose Inazio Basterretxea y Petxo Idoiaga.
Considero que son válidas en la casi totalidad de los contextos iberoamericanos. Al pie se ofrece acceso a la totalidad del trabajo.
Conclusiones
1. Los adolescentes vascos disponen de un alto grado de equipamiento tecnológico lo que favorece el consumo cada vez más personalizado e individualizado de los medios (un 24% dispone ya de aparato de TV para uso personal). El estudio corrobora una manifiesta predilección por la cultura audiovisual frente a la escrita. Así lo atestiguan las cifras del consumo de prensa y de lectura de libros no de texto, anecdóticas en comparación al uso que los adolescentes hacen de la televisión, la radio o Internet. Es muy significativo el hecho de que un 56% de los encuestados utilice la red tres o más días a la semana y que el 25% disponga de conexión personal. Los adolescentes vascos, por tanto, están familiarizados con las nuevas tecnologías, las consideran herramientas útiles y necesarias y saben que han modificado sus vidas.
2. La mejora cuantitativa del equipamiento tecnológico no ha traído cualitativamente consigo un incremento similar en su grado de alfabetización audiovisual. Las respuestas recogidas en los grupos de discusión demuestran que en determinados aspectos, los adolescentes vascos son mediáticamente analfabetos: identifican con excesiva facilidad la imagen con la realidad, tienen dificultades para decodificar determinados mensajes y, frecuentemente, se olvidan de la polisemia del discurso informativo.
3. Al mismo tiempo, los adolescentes vascos manifiestan una actitud muy crítica hacia los medios, (el 73% considera que “están manipulados”), postura que se confirma cuando valoran la credibilidad de los programas informativos. Entre los adolescentes de la Comunidad Autónoma Vasca y Navarra, las cadenas vascas tienen una credibilidad muy superior a la del resto de canales. No ocurre lo mismo en Iparralde, donde los informativos de las cadenas estatales gozan de gran aceptación. Esta actitud crítica hacia los medios explica que los éstos tengan una influencia secundaria en sus opiniones. En cuestiones clave como la política, la sexualidad, las drogas o la inmigración, la encuesta demuestra que el entorno familiar y la cuadrilla influyen mucho más que los medios en la formación de sus opiniones.
4. Las entrevistas realizadas al grupo de expertos coinciden en subrayar que los centros vascos de enseñanza viven de espaldas a la Educomunicación. Su inclusión en el currículo no sobrepasa el umbral de la anécdota. Los datos de la encuesta revelan que los medios no son objeto de comentario en las aulas: ni se discuten, ni se cuestionan; simplemente se ignoran. Es una situación similar a la que se da en países del entorno europeo, pero que dista mucho de lo que ocurre en otros lugares como el Reino Unido, Australia o Canadá.
5. Los expertos entrevistados corroboran que en el País Vasco el mundo de la escuela vive instalado en la quimera tecnológica, alojado en la fascinación por la informática, atracción que se traduce en un afán por enseñar al alumno el funcionamiento del teclado o del ratón, pero que es incapaz de suministrarle herramientas que le faciliten mejorar sus destrezas comunicativas. No se siguen las recomendaciones de la UNESCO en materia de Educomunicación. El modelo actual se aproxima más a una educación para los medios, en vez de una educación en medios.
6. Fruto de esa despreocupación del sistema educativo, el profesorado vasco carece, en estos momentos, de la formación y los medios necesarios para impartir educación en comunicación dentro de las aulas. Así lo han corrobora el equipo de expertos que ha colaborado con la presente investigación. Las escasas iniciativas que se han llevado a cabo en los últimos años han sido producto de la iniciativa personal de grupos reducidos de docentes –o de padres y madres- que han cultivado sus inquietudes de forma autodidacta.
7. La implantación de las nuevas tecnologías exige nuevos retos para el sistema educativo, desafíos que indefectiblemente pasan por la inclusión de la Educomunicación dentro del currículo escolar. Podrá discutirse sobre la forma, si debe ser materia obligatoria, transversal u optativa. Sin embargo, todas las fuentes consultadas en la investigación coinciden en que se debe hacer mucho más de lo que se ha hecho hasta la fecha. La sociedad de la información exige formar sujetos con capacidad crítica, personas aptas para resolver problemas nuevos, seres de mente creativa que sepan interpretar realidades cada vez más complejas y llenas de matices. En ese sentido, la Educomunicación es, sin duda, un instrumento útil.